Ganó 185 millones en la lotería y murió unos años después, ¿en qué se lo gastó?
A todos nos parece en algún momento en el que perdemos la fe, que la gente que gana la lotería son personajes de ficción que han puesto ahí para que pensemos que todo es real y que sigamos jugando. Pero en realidad son personas muy reales que existen, que son felices por todos los millones que ganan, que viven y que… también mueren. Algunos antes que otros, como le ocurrió a Colin Weir, que pocos años después de hacerse millonario, murió.
Colin ganó 185 millones en el Euromillones y con esa cifra batió un nuevo récord. Pero solo unos años después, en 2019, falleció. Tenía 71 años y pasó alrededor de 7 años siendo millonario. Durante ese periodo de tiempo tuvo la suerte y la desgracia de su lado. Vivió la maldición de los nuevos millonarios, algo que se dice que persigue a todas las personas que ganan dinero de repente en la lotería.
Él y su mujer habían estado 38 años casados, pero se divorciaron poco antes de fallecer. El motivo de la muerte fue una breve enfermedad que acabó con su vida por mucho dinero que tuviera. No ha trascendido la enfermedad exacta que tenía, pero sí en qué llegó a gastar su dinero.
En el momento en el que falleció, Colin había gastado alrededor de la mitad del dinero que ganó. Más exactamente hay que decir que el dinero lo tuvo que dividir con su esposa y que a él le quedaron 92 millones. La mitad de eso, unos 46 millones, fue lo que se gastó.
¿Y en qué se lo gastó exactamente? Eso que muchas personas nos preguntamos a nosotros mismos: «¿Qué harías si fueras millonario?» él lo llevó a cabo en la realidad y lo usó para lo siguiente:
- Compró casi todas las acciones del equipo de fútbol Partick Thistle FC y al final las donó a los fans
- Donó dinero al Partido Nacionalista Escocés
- Compró una mansión valorada en cuatro millones de euros
- Compró una casa en Mallorca para veranear
- Realizó inversiones
- Compró cuatro coches de lujo
- Y compró tres caballos de categoría purasangre