Los madrileños están locos por conseguir su vacuna

Las últimas horas han sido estresantes para los madrileños, quienes al ver que se ha liberado el sistema de reserva de cita para la vacuna, han comenzado a moverse de manera desesperada para conseguir su inyección. Toda la capital se quiere ir de vacaciones y son conscientes de que tener o no la vacuna puede ser lo que amplíe o limite sus posibilidades de viajar. Por ello, todo el mundo está como loco.

Tras la flexibilización de las medidas para conseguir vacuna, lo que ha hecho Sanidad es que se produzca un “sálvese quien pueda”. Todo el mundo ha comenzado a comprobar los huecos en los centros médicos, hospitales y clínicas, intentando buscar un horario en el que pudieran acceder a la vacuna cómodamente.

Algunas personas se han recorrido la ciudad de punta a punta, otras han decidido esperar largos periodos de tiempo e incluso no pensar en gestionar la vacunación de toda la familia al mismo tiempo. El padre en un centro, la madre en otro, los hijos, ya mayores, en otro distinto. Sea como sea, había que recibir la vacuna lo antes posible.

Las personas que se negaban a ponerse la vacuna lo tienen ahora más fácil que nunca: hay toneladas de voluntarios que están deseando que se la pongan y que harían lo que fuera por conseguirla. Se rumorea incluso que hay vacunas circulando por la deep web, aunque está claro que hay que fiarse poco de lo que puedan deparar esas inyecciones.

Todo ello tiene una explicación que se resume en una sola palabra: vacaciones. Las vacaciones, para los españoles, son sagradas. No es como otros países, como Asia, donde eso de vacaciones suena a chino, sino que, para un español, las vacaciones de verano no se tocan ni en broma. Por ello, todo el mundo quiere tener la vacuna para poder irse de vacaciones en condiciones. El tinto de verano de 2021 será sin mascarilla.