Una juez elige porque le apetece el nombre de una niña

En Vitoria todavía no se creen el incidente que ha ocurrido con una de sus juezas. La magistrada se negó a inscribir el nacimiento de una niña con el nombre que sus progenitores habían elegido. Y, en su lugar, amenazó con ser ella misma la que eligiera el nombre de la niña. ¿Pero qué?

¿Qué nombre es ese? El nombre de la polémica es “Hazia”. Fuera del País Vasco posiblemente no genere ningún tipo de impresión ni efecto. Pero, en euskera, Hazia tiene varios significados, como “semilla” o “semen”. Debido a ello, la jueza ha puesto el grito en el cielo y ha impedido que la familia lo elija para su hija.

Al final, la jueza ha determinado por imposición judicial, que el nombre de la niña es Zia. Explica que ha elegido este nombre porque tiene el mismo significado en latín y porque se parece a la petición original. ¿Pero quién es la jueza para decidir el nombre que los padres le ponen a su hijo? Ridículo.

Hazia, por otro lado, es un nombre que tiene otros significados, como “cuidar”. Los padres van a recurrir la sentencia y a luchar por lograr dar el nombre que ellos quieran a su hija como debería ser derecho en todas las familias.

Este incidente ha servido para descubrir que la misma jueza ya actuó de forma similar en otro incidente. En ese tiempo el nombre que la familia quería dar al niño era Ilargi, que significa “luna” en euskera. Su explicación fue que no podía usar ese nombre porque se trata de un nombre de chica. Y, en su lugar, lo que hizo la jueza fue decidir que el niño se llamase “Jon”.

No auguramos un buen futuro para la jueza y su puesto de trabajo a la vista de lo mal que están estas decisiones y el tipo de sociedad libre en la que vivimos hoy día.